Como sucede con muchos otros campos del Marketing Digital, es más que probable que, aunque no sepas con exactitud qué es el SEO Social, lleves poniendo en práctica desde hace mucho tiempo el conjunto de acciones que engloba esta expresión. Porque SEO Social no es otra cosa que todo aquello que hacemos en las redes sociales (publicar entradas, lanzar promociones, dar likes estratégicos, hablar bien de partners o sites amigos, etc.) con las miras puestas en el posicionamiento SEO de nuestra web corporativa o de empresa.
Es decir, que si tu empresa tiene una cuenta en cualquier red social (o en varias), como decíamos, es difícil que en tu rutina de administración de la misma no lleves a cabo de manera regular alguna de estas acciones. Aunque, en realidad, lo que de verdad importa es si estás realizando dichas acciones de manera correcta (eficiente, constructiva, etc.) o si lo estás haciendo, sencillamente, por inercia. Si tu caso es este último (nunca habías oído hablar de SEO Social hasta ahora), te invitamos a que reflexiones sobre qué tipo de mejoras puedes implementar en tu plan de trabajo para optimizar los resultados en todo lo que a posicionamiento SEO se refiere.
Content Marketing: Sentando las bases del SEO Social
Esta es la premisa clave del posicionamiento SEO en redes sociales: toda acción que llevemos a cabo en las mismas debe tener el respaldo de un contenido de calidad alojado en el site de nuestra empresa (hacia el que redirigirán las entradas que compartamos con nuestros seguidores). Sin esta correspondencia, por más followers que tengamos jamás lograremos que Google nos califique como una marca relevante (es decir, digna de aparecer en los primeros puestos de los buscadores). Es decir, que antes de focalizar nuestro esfuerzo en los Social Media es imprescindible que trabajemos el interior de nuestra web, y, en particular, aquellas categorías que sean más susceptibles de ser visitadas por los usuarios provenientes de las redes. Entre dichas categorías o espacios de nuestro site destaca, claro, el blog.
Sin un blog bien estructurado y en el que colguemos contenido de valor real de manera regular será muy complicado notar mejoras significativas en cuanto a posicionamiento SEO se refiere. ¿Por qué? Sencillamente, porque los visitantes que entren a nuestra página (y, en concreto, a nuestro blog) esperarán encontrar allí una correlación satisfactoria con aquello que le prometimos en, por ejemplo, una publicación en Facebook. Si el artículo al que le dirige dicha publicación es de baja calidad o no se corresponde con lo que el usuario esperaba, este se sentirá defraudado y no volverá a visitarnos; además de haber perdido a un potencial consumidor (que no compartirá nuestra publicación en su muro ni nos seguirá), nuestra marca estará perdiendo credibilidad, algo muy pernicioso a medio y largo plazo para cualquier firma.
Apelar a la interactuación como prioridad del SEO Social
Ya que ni la presencia en las redes sociales ni las publicaciones que en ellas colguemos califican de manera directa de cara al posicionamiento SEO, debemos fijar nuestra atención en un aspecto clave del SEO Social: la difusión. Cuantas más personas se hagan eco de nuestras publicaciones, compartiéndolas, clicando en ellas, comentándolas, valorándolas, etc., más puntos estaremos ganando en materia de posicionamiento orgánico. Porque eso es precisamente lo que le gusta a Google y lo que valora sobremanera cuando se trata de indexar una web por encima de otra: la interactuación de los usuarios. Si trabajamos este aspecto (que pasa, como decíamos, por una programación y un seguimiento óptimos de los contenidos de nuestro blog), los resultados no tardarán en hacerse notar. Los concursos que con regularidad se anuncian en redes son un claro ejemplo de esta idea.
Asimismo, es importante que, pese a lo dicho al inicio del párrafo anterior, no descuidemos aquellos apartados de las redes sociales destinados a incluir información de nuestra empresa (perfil, biografía, etc.). Utilizar las palabras clave adecuadas e informar de manera elocuente sobre el cometido de nuestra empresa puede ser crucial para que un usuario llegue a nosotros gracias a nuestra cuenta de empresa en una red social, ya que es habitual que dicho perfil aparezca antes que la URL de nuestro site (dada la importancia de los Social Media en la actualidad).